(Este post fué escrito en inglés por Juan Cristobal Nagel en Caracas Chronicles)
¿Por qué cuesta 39% más que el promedio del resto del mundo para que una empresa española construya una planta de energía en Cumaná? ¿Por qué cuesta 12% más que el más caro de sus proyectos? Y, ¿qué se necesita en estos días para que alguien en Venezuela le eche una mirada a estos números?
Estas son sólo algunas de las preguntas derivadas de los acuerdos a los que han llegado el gobierno español, las multinacionales de ese país y el gobierno de Chávez. Utilizando estimados de la Agencia Internacional de Energía (AIE), he argumentado que no hay manera de que la planta eléctrica de de ciclo combinado de 1.000 megavatios (MW) que se está construyendo en Cumaná, cuyo valor anunciado es de 1,4 millones de euros, esté siendo comprada a precios de mercado. El sobreprecio de muchos millones de dólares está ahí a la vista.
Por supuesto, si usted cree o no que nos están cobrando de más depende totalmente de qué tan fiable cree usted que es el punto de referencia. Si usted cree que la AIE es una referencia dudosa, entonces superficialmente, no hay forma de saber si el proyecto de Iberdrola se basa en los costos reales o si estamos enfrentando algo mucho más siniestro.
Pero resulta que existen otros puntos de referencia disponibles: los proyectos de ciclo combinado de Iberdrola en otras partes del mundo.
Como dijimos en un artículo anterior, el proyecto de Iberdrola le cuesta a los contribuyentes de Venezuela 1.400 euros por kilovatio (kW) de capacidad instalada. Para obtener ese número, simplemente divida 1,45 mil millones de euros por una capacidad de 1 millones de kilovatios la planta tendrá (1 MW es de 1.000 kW, por lo que 1.000 MW es de 1 millones de kW).
Si uno cree lo que dice la AIE, en América Latina un proyecto de estos debiera costar aproximadamente 540 euros el kW.
La pregunta que hay que hacerse es: ¿Cuáles fueron los costos de otros proyectos de Iberdrola de plantas de ciclo combinado? Veamos:
– En Lituania, están construyendo una planta de 440 MW por 330 millones de euros. El costo de la planta de Lituania es de 750 euros por kW.
– En Argelia, están construyendo una planta de 1.200 MW por 1,47 mil millones de euros. El costo de la planta argelina es de 1.225 euros por kW.
– En Rusia, están construyendo una planta de 403 MW por 311 millones de euros. El costo de la planta rusa es de 771 Euros por kW.
– En Qatar, están construyendo una enorme planta de 2.000 MW por 1,63 mil millones de euros. El costo de la planta de Qatar es de 815 euros por kW.
– En Letonia, están construyendo una planta de 420 MW por 300 millones de euros. El costo de la planta de Letonia es de 714 euros por kW.
Los números no mienten. El proyecto de Cumaná es, por mucho, la planta de ciclo combinado más cara de Iberdreola.
Puede ser que haya una razón perfectamente válida para todo esto, pero lo dudo. ¿Qué explicación posible, excepto la corrupción, puede haber para tal diferencia? ¿Saben de esto los accionistas de Iberdrola, tomando en cuenta que sus ADRs se cotizan en la Bolsa de Nueva York y que, por ello, Iberdrola cae bajo la jurisdicción de la ley Americana de Prácticas Corruptas en el Extranjero? ¿Qué tiene que decir la legislación europea acerca de esto? ¿Por qué los diputados europeos no hacen averiguaciones al respecto?
¿Y por qué los periodistas venezolanos hacen caso omiso de esto?
Los contribuyentes venezolanos se merecen una respuesta.